El terrible evento que se espera: las grandes bolas de fuego.
Después vi otra bestia que subía de la tierra; y tenía dos cuernos semejantes a los de un cordero, pero hablaba como dragón. Y ejerce toda la autoridad de la primera bestia en presencia de ella, y hace que la tierra y los moradores de ella adoren a la primera bestia, cuya herida mortal fue sanada. También hace grandes señales, de tal manera que aun hace descender fuego del cielo a la tierra delante de los hombres. Y engaña a los moradores de la tierra con las señales que se le ha permitido hacer en presencia de la bestia, mandando a los moradores de la tierra que le hagan imagen a la bestia que tiene la herida de espada, y vivió. (Apocalipsis 13:11-14)
En la mañana del viernes pasado, justamente antes de despertar, se me presentó una escena sumamente impresionante. Tuve la sensación de que despertaba del sueño en un lugar que no era mi casa. Desde las ventanas veía una terrible conflagración. Grandes bolas de fuego caían sobre las casas, y de ellas salían dardos encendidos que volaban en todas direcciones. Era imposible apagar los incendios que se producían, y muchos lugares estaban siendo destruidos. El terror de la gente era indescriptible. Desperté después de cierto tiempo y descubrí que estaba en mi hogar.—El Evangelismo, 25-26 (1906). {EUD 24.3}
Una escena muy impresionante pasó ante mí en visiones nocturnas. Vi una inmensa bola de fuego que caía en medio de un grupo de hermosas casas que fueron destruidas instantáneamente. Oí a alguien decir: “Sabíamos que los juicios de Dios visitarían la tierra, mas no pensábamos que vendrían tan pronto”. Otros dijeron en tono de reproche: “Vosotros que sabíais estas cosas, ¿por qué no dijisteis nada? ¡Nosotros no lo sabíamos!—Joyas de los Testimonios 3:296 (1909). {EUD 24.4}
Dios nos da relojes que nos muestran el tiempo, pero Él permite que utilicemos nuestra inteligencia para averiguar cómo se alinean las profecías y sus cumplimientos, a los tiempos en el reloj a través de los acontecimientos mundiales. Estamos viendo más y más cómo se aplica este principio, que Jesús mismo explicó:
Y ahora os lo he dicho antes que suceda, para que cuando suceda, creáis. (Juan 14:29)
Debemos mostrar fe cuando el verdadero carácter de las profecías simbólicas es revelado. Las profecías son dadas como avisos—como advertencias de la ira de Dios, que pronto será derramada, sin misericordia. Muchos, sin embargo, no parecen estar satisfechos con el cumplimiento de las profecías simbólicas. Por ejemplo, ellos están esperando que una montaña literal caiga en el mar como el cumplimiento de la segunda trompeta. Es por eso por lo que piensan en un asteroide o un cometa. Sin embargo, al hacerlo, se olvidan de que en la tercera trompeta una estrella completa tendría que caer a la tierra, sin dejar más espacio para las trompetas o las plagas restantes que han de cumplirse, porque una estrella ya involucraría al planeta entero en su proceso de fusión atómica, lo que haría muy difícil que la humanidad sobreviva.
Las trompetas de advertencia no son destrucción en el sentido de las plagas, sino símbolos para eventos de agitación mundial en el ámbito político y religioso. Las trompetas ayudan a formular una hipótesis acerca de lo que las plagas traerán a la humanidad cuando el cáliz de la ira de Dios sea llenado y derramado. Todavía estaremos en un ciclo de las trompetas complementario hasta el 20 de agosto 2018, durante el cual no habrá eventos que destruyan el mundo completamente. Desafortunadamente, las personas no prestan atención a estas advertencias divinas, que vienen como la voz apacible en la que Elías reconoció a Dios.
El le dijo: Sal fuera, y ponte en el monte delante de Jehová. Y he aquí Jehová que pasaba, y un grande y poderoso viento que rompía los montes, y quebraba las peñas delante de Jehová; pero Jehová no estaba en el viento. Y tras el viento un terremoto; pero Jehová no estaba en el terremoto. Y tras el terremoto un fuego; pero Jehová no estaba en el fuego. Y tras el fuego un silbo apacible y delicado. Y cuando lo oyó Elías, cubrió su rostro con su manto, y salió, y se puso a la puerta de la cueva. Y he aquí vino a él una voz, diciendo: ¿Qué haces aquí, Elías? (1 Reyes 19:11-13)
La destrucción de las plagas comenzará en dos puntos de tiempo diferentes, ya que la puerta de la gracia para la humanidad cerrará un poco más tarde que la puerta de la gracia para la apóstata Iglesia Adventista del Séptimo Día, que no cumplió con su misión dada por Dios, y no advirtió al mundo con el mensaje del Cuarto Ángel (que es el fuerte clamor del tercer ángel). Su castigo debe llegar antes por esa razón.
Porque es tiempo de que el juicio comience por la casa de Dios; y si primero comienza por nosotros, ¿cuál será el fin de aquellos que no obedecen al evangelio de Dios? (1 Pedro 4:17)
El silbo apacible y delicado es la voz del Espíritu Santo que nos habla. Las 372 porciones del Espíritu Santo, que durante mucho tiempo pensamos eran para el tiempo de las plagas, ya han sido usadas. La misericordia de Dios es demostrada por el hecho que, desde el 22 de noviembre de 2016, se nos ha permitido utilizar las 636 raciones que quedaban del inicio retrasado del juicio de los vivos (ver las líneas de tiempo de Daniel). Sin embargo, estas raciones se agotarán el 20 de agosto de 2018 y entonces el Espíritu Santo será completamente retirado de la tierra. Ese será el comienzo de las plagas para la humanidad.
El comienzo del castigo para la iglesia del juicio de Dios (Laodicea) debe ser por lo tanto un poco antes del 20 de agosto de 2018. Este castigo será la caída de las bolas de fuego que destruirán las “hermosas mansiones” adventistas, incluyendo su edificio de la Conferencia General. Debido a que la séptima y última trompeta es el tiempo de las plagas mismo, y estas durarán exactamente 280 días de acuerdo con nuestro entendimiento más reciente –el período de gestación en la mujer antes de los dolores de parto de la venida del Salvador-- el único otro momento para que el juicio comience en la casa de Dios, es el comienzo de la sexta trompeta complementaria. Es una línea del trono, lo cual es muy apropiado para la situación. Apunta a la fecha del 3 al 10 de junio de 2018.
Ahora algo aterrador aparece. Pensemos de nuevo en el Desafío del Monte Carmelo que el hermano John hizo en 2015. Dios le mostró que la sexta trompeta sería la fecha de las bolas de fuego sobre Su iglesia caída. Eso le impulsó a escribir lo siguiente el 20 de abril de 2015, unos meses antes del 8 de julio de 2015, en la sexta trompeta del ciclo original...
El Desafío
Esta fecha para el desafío moderno de Elías fue establecida por Dios (y definitivamente no por nosotros, porque no estábamos vivos en el tiempo de Elías).
La sexta trompeta es el momento perfecto para un evento divino como ese, porque en el texto de la sexta trompeta, encontramos que fue fijada para la hora, día, mes y año.[1]
La sexta trompeta del Ciclo de las Trompetas de Orión traerá destrucción y muerte a aquellos quienes han entrado sigilosamente a la iglesia de Dios para destruirla desde adentro. Los profetas modernos de Baal y Asera encontrarán su fin en ese día (y en el período que le sigue).
Yo, John Scotram, como representante de los Adventistas del Gran Sábado levanto ahora mis ojos a Dios en la Nebulosa de Orión y digo con Elías:
Jehová Dios de Abraham, de Isaac y de Israel, sea el miércoles 8 de julio de 2015 manifiesto que Tú eres Dios en Israel, y que yo soy Tu siervo, y que por mandato Tuyo he hecho todas estas cosas. Respóndeme, Jehová, respóndeme, para que conozca este pueblo que Tú, oh Jehová, eres el Dios, y que Tú vuelves a Ti el corazón de ellos.
¡Limpia Tú, oh Jehová, Tu casa del mal olor de los jesuitas y de la apostasía! Deja que Tu fuego consumidor, según Ezequiel 9, haga su obra para que Tu iglesia pueda brillar de nuevo con la luz que Tú concebiste para ella, para que pueda iluminar toda la Tierra.
Nosotros, los Adventistas del Gran Sábado, convocamos a Ted Wilson, a los líderes apostatas de la Iglesia Adventista, a los dirigentes de las iglesias anteriormente protestantes y a TODA LA CRISTIANDAD para tomar una decisión de seguir a Aquel quien les creó, o a aquel quien les destruirá. Es nuestro deseo que puedan darle a Dios el honor y la autoridad que está anclada en ¡Su sábado del séptimo día!
Si estamos equivocados y Dios no hace descender fuego desde el Cielo, entonces el 8 de julio de 2015 será el final de este movimiento y de los sitios web de los dos testigos – el Reloj de Orión y el Buque del Tiempo – que han atormentado a los moradores de la tierra (especialmente a los adventistas).[2] Entonces podrán continuar – sin la esperanza del inminente regreso de Cristo – dedicándose a sus pecados sin ser molestados y creyendo que todo ha sido hecho en la cruz y que todo el mundo – desde un infanticida hasta un violador, desde un pedófilo hasta el cliente de los burdeles de animales de Dinamarca[3] – se salva automáticamente siempre y cuando esta persona simplemente invoque el nombre de Jesús sin ningún cambio de comportamiento.
[Nota: De una forma u otra, ¡la culpa de estos eventos será echada a nosotros! ¡Que nadie venga a la tonta idea de querer ayudar! ¡Debe ser un juicio visible de Dios sin ninguna intervención humana! No somos fanáticos que amenazamos a alguien con la muerte. Le pedimos a Dios que intervenga, porque nosotros mismos somos impotentes. Y si Él está con nosotros, ¡Él luchará por nosotros mientras nos escondemos![4]]
Pero si estamos en lo correcto y los últimos cinco años de la proclamación no han sido en vano, entonces para muchos será demasiado tarde para arrepentirse. Muchos morirán, y el fuego que se inicia en San Antonio, se extenderá por todo el mundo. Hay mucho para limpiar – no sólo la Conferencia General de los Adventistas del Séptimo Día. Las leyes dominicales seguirán muy rápidamente, y los sobrevivientes reconocerán que estábamos en lo correcto desde el principio.
Todo ocurrirá con la velocidad de una tormenta de viento divino, así que apenas habrá suficiente tiempo para respirar. La Lluvia Tardía será derramada tan fuertemente sobre el último pueblo fiel de Dios que todos los que faltan de los 144.000 serán encontrados y sellados en tan sólo tres meses y medio.
El derramamiento del Espíritu en los días de los apóstoles fue “la lluvia temprana”, y glorioso fue el resultado. Pero la lluvia tardía será más abundante. {EUD 159.4}[5]
La destrucción no vino sobre la iglesia en ese tiempo, pero no tuvimos que darnos por vencidos. Dios concedió un aplazamiento, y la Iglesia Adventista del Séptimo Día utilizó un truco para evitar su destrucción en aquel momento. Hoy sabemos qué Dios ha estado siguiendo, durante mucho tiempo otro plan. Sin embargo, ese fue uno de los puntos más críticos de nuestra misión, porque el hermano John había oído claramente la voz del Señor, que fue lo que lo llevó a hacer el Desafío.
Un misterio divino fue revelado en el transcurso de la segunda proclamación del tiempo, este misterio es descrito en detalle en la serie el Sacrificio de Filadelfia. Aprendimos que el ciclo de las trompetas no sólo fue dividido en dos, sino que el segundo ciclo se ejecuta en la dirección opuesta. El hecho de que es así, fue recientemente confirmado (a partir de este escrito) por la fecha exacta de la segunda trompeta complementaria el 6 de marzo de 2017, la cual nosotros predijimos de antemano.
¡Eso significa que el tiempo está avanzando hacia atrás! Descubrimos este fenómeno no sólo en el ciclo complementario de las trompetas, sino también en la marcha hacia atrás de la Lista de los Grandes Sábados, que se presenta de repente en una forma comprimida, comportándose como un cromosoma justo antes de la división celular, es decir, antes de su multiplicación. Debido a que la luz del faro del tiempo nos alcanzó el 27 de abril de 2013, pudimos determinar el punto en la historia de la humanidad, o en la de la iglesia de Dios de los últimos días, al que nos tendríamos que regresar. Estamos viajando hacia atrás en el tiempo hasta el año del 70° jubileo, contado a partir de cuándo el jubileo fue instituido por primera vez, el cual comenzó en el día de la expiación en 1890. Dios nos lleva de nuevo al principio del mensaje del Cuarto Ángel, cuando la Iglesia Adventista del Séptimo Día cometió su error fatal en 1888, impidiendo de esa manera que Jesús regresara en 1890.
Dios retuvo el Sol de Justicia el 23 de octubre de 2016, al igual que cómo lo hizo en el tiempo de Josué, para que la batalla pudiera llegar a un final victorioso. Jesús no debía venir aún, para que muchos pudieran dar testimonio del Padre. Sin embargo, en el reloj de sol de Acaz, la sombra no se detuvo— ¡sino que retrocedió!
He aquí yo haré volver la sombra por los grados que ha descendido con el sol, en el reloj de Acaz, diez grados atrás. Y volvió el sol diez grados atrás, por los cuales había ya descendido. (Isaías 38:8)
Nada de lo escrito en la Palabra de Dios carece de sentido. Dios muestra claramente que Él es el Tiempo, y que puede hacer con el tiempo lo que desee, incluso hacer que corra hacia atrás cuando Él acepta una solicitud desinteresada.
Así que, independientemente de si vemos el ciclo complementario de las trompetas como un ciclo autónomo, o como la reversión del ciclo de las trompetas original, siempre volvemos a visitar cada trompeta del ciclo original durante nuestro viaje al pasado. En la sección Profecías Cumplidas de nuestro sitio web de estudio Granja Nube Blanca, estamos escribiendo sobre el cumplimiento adicional de los textos de las trompetas, que aún no habían sido completamente cumplidos en el primer ciclo. Ya hemos encontrado armonías sorprendentes. Cada profecía individual de cada texto está siendo complementada, de ahí el nombre del nuevo ciclo.
Así es como llegamos de nuevo a la sexta trompeta del ciclo original, cuando la petición del hombre cuyo “regreso” fue profetizado en Malaquías capítulo 4, fue escuchada por Dios en el momento exacto profetizado. El 3 de junio de 2018, que corresponde al 8 de julio de 2015, el Desafío del Monte Carmelo de John Scotram y de los Adventistas del Gran Sábado, será visiblemente respondido por Dios ante el mundo entero, y el fuego caerá sobre la apóstata Iglesia Adventista del Séptimo Día a partir de entonces y hasta e incluyendo el 10 de junio de 2018. Entonces estará claro que ellos tenían la verdad, pero no vivieron a la altura de ella. (Cualquier otra interpretación de su destrucción ¡es una mentira de Satanás!) Que Dios tenga piedad de aquéllos que vean los juicios de Dios, que caerán sobre todos los hombres poco después, y se conviertan antes del 20 de agosto de 2018.
Dios nos ha dado mucha luz adicional que confirma que de hecho ya estamos en el tiempo de las plagas, aunque la humanidad esta siendo atraída hacia una falsa sensación de seguridad, debido a que interpretan los textos bíblicos de forma incorrecta y demasiado literal. Esto cumple la profecía:
